viernes, 3 de junio de 2011

JUEGO DE PASION



Juego de Pasión se sostiene en dos pilares fundamentales: la belleza de Megan Fox y el notable guión de Mitch Glazer. Bill Murray, apagado como siempre, hace de un gángster poco creíble, y Mickey Rourke, que a sus 59 años sigue seduciendo, representa a un trompetista en decadencia a quien Murray manda a matar por haberlo engañado con su esposa. Así, un matón lo lleva al desierto de Arizona y se dispone a asesinarlo, pero de pronto comienzan a suceder una serie de situaciones un tanto extrañas y poco creíbles, las que recién se comprenden al final de la película.

No hay comentarios:

Publicar un comentario